Las festividades decembrinas son, para muchas personas, sinónimo de alegría, reuniones familiares y momentos entrañables. Sin embargo, para quienes están atravesando un duelo, estas fechas pueden sentirse como un recordatorio doloroso de lo que se ha perdido. Lo que debería ser una época de conexión y celebración puede convertirse en un periodo de melancolía, confusión y agotamiento emocional.

La sociedad a menudo nos impulsa a abrazar la alegría durante estas fechas, dejando poco espacio para quienes experimentan tristeza o añoran profundamente a un ser querido. Esta desconexión entre lo que se espera y lo que realmente sentimos puede ser abrumadora, tanto para quienes están en duelo como para las personas cercanas que buscan apoyarlos.

En este artículo, exploraremos por qué las festividades pueden intensificar el duelo, cómo manejar estas emociones y qué pasos pueden tomarse para encontrar pequeños destellos de calma y consuelo en medio de la tormenta emocional.

Las festividades: un espejo para la pérdida

Las celebraciones de fin de año suelen estar ligadas a rituales y tradiciones familiares, y es precisamente ahí donde el vacío de la ausencia se hace más evidente. El lugar vacío en la mesa, la falta de una voz que solía iluminar las conversaciones o los recuerdos compartidos pueden traer consigo una profunda sensación de soledad.

La Asociación Estadounidense de Psicología (APA) explica que las fechas significativas suelen activar emociones intensas en quienes enfrentan una pérdida reciente o incluso en quienes llevan años viviendo con la ausencia. El duelo no tiene un tiempo límite, y el paso de los años no siempre mitiga su impacto, especialmente en momentos de alto simbolismo como las fiestas decembrinas.

Además, muchas personas sienten la presión de mantener una apariencia “fuerte” o alegre para no incomodar a los demás, lo que puede generar un desgaste emocional adicional. Aceptar el duelo y permitir que se exprese durante estas fechas puede ser un desafío, pero también una oportunidad para encontrar un sentido de conexión y significado.

Consejos para sobrellevar el duelo durante diciembre

Aunque el duelo es una experiencia profundamente personal, hay algunas formas en las que puedes navegar este periodo con mayor compasión hacia ti mismo o hacia tus seres queridos:

Da espacio a tus emociones

Es normal sentir tristeza, enojo o incluso culpa. No trates de bloquear tus sentimientos ni de ajustarte a las expectativas de otros. Como mencionaba la Dra. Elisabeth Kübler-Ross, pionera en los estudios sobre el duelo: “El duelo no es un problema a resolver, sino un proceso que debe ser vivido.” Permitirte sentir, sin juicio, es un acto de cuidado hacia ti mismo.

Adapta las tradiciones a tus necesidades actuales

Algunas tradiciones pueden ser demasiado dolorosas en este momento, y está bien dejar ir o modificar aquellas que no te aporten paz. También puedes crear nuevos rituales que honren la memoria de quien extrañas, como encender una vela en su nombre, compartir historias sobre ellos o realizar una donación en su honor.

Crea un plan flexible

Las reuniones sociales pueden ser agotadoras durante el duelo. Planifica de antemano cuáles actividades o eventos te gustaría atender y cuáles prefieres evitar. Habla con tus seres queridos para que comprendan tus necesidades y límites.

Busca apoyo en tu red cercana

No tienes que enfrentar estas emociones en soledad. Hablar con familiares, amigos o incluso un grupo de apoyo puede ayudarte a sentirte comprendido y acompañado. A veces, un simple abrazo o la presencia de alguien que escuche puede marcar una gran diferencia.

Prioriza tu bienestar físico y emocional

Durante el duelo, es común que los hábitos de autocuidado se vean descuidados. Intenta mantener rutinas básicas de descanso, alimentación y movimiento, ya que esto puede brindarte fortaleza para afrontar el día a día.

Permítete celebrar a tu manera

No tienes que renunciar por completo a la celebración. Si sientes que puedes hacerlo, encuentra pequeños momentos que te aporten alegría o tranquilidad, como escuchar música, preparar una comida especial o simplemente disfrutar de una taza de café en calma.

Para quienes acompañan a alguien en duelo

Si tienes un ser querido que está viviendo un duelo durante estas fechas, tu apoyo puede ser invaluable. Más que ofrecer consejos o palabras de ánimo, lo más importante es estar presente. Escucha sin juzgar, evita frases como “todo estará bien” o “tienes que ser fuerte” y, en su lugar, valida sus sentimientos.

Una pregunta tan simple como: “¿Cómo puedo acompañarte en estos días?” puede abrir un espacio para que esa persona exprese sus necesidades. Recuerda que tu presencia y empatía son los regalos más significativos que puedes ofrecer.

Vivir un duelo durante las festividades decembrinas es un desafío que, aunque difícil, puede abrir caminos hacia una mayor comprensión de uno mismo y de las emociones que nos conectan con quienes amamos. No se trata de ignorar el dolor ni de fingir felicidad, sino de encontrar maneras de vivir estas fechas con autenticidad, respetando el proceso personal de cada uno.

Las palabras de la National Hospice and Palliative Care Organization (NHPCO) resuenan con fuerza en este contexto: “El duelo no tiene una fecha de vencimiento, pero con el tiempo puede transformarse en un recordatorio del amor que permanece.”

Si este año enfrentas las fiestas desde el duelo, recuerda que está bien vivirlas a tu manera.